Es normal que con el transcurrir del tiempo y las circunstancias que se presentan, los hábitos que antes solíamos practicar, cambien; por ejemplo, nuestra manera de comunicarnos ha mutado bastante desde la llegada de los smartphones, tanto como el sistema de educación, estrategias de marketing, entre otros. En la actualidad, a causa de la propagación del coronavirus en el mundo, nuestros procesos de higiene y lavado de prendas textiles también han variado estricta y obligatoriamente.
Hasta el momento, no ha surgido una cura definitiva que pueda eliminar inmediatamente el COVID-19 pero, sí existen procesos a través de los cuales, se logra eliminar el virus por completo y así, prevenir su propagación. Especialmente, para las personas que se encuentran laborando en los sectores con mayor rango de probabilidad de contagio.
Trabajar en el área de salud o en los supermercados, ya sea como atención al cliente o personal de limpieza, se ha convertido en una de las labores más valoradas y necesarias para nuestra comunidad a causa del COVID-19. Para ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió un comunicado de prevención y control de infecciones en los centros de atención frente a llegada de este virus.
En este comunicado se muestran los procesos de lavado que se deben seguir para desinfectar los uniformes laborales, procesos que las lavanderías industriales, se encuentran realizando, fomentando así, la tranquilidad en dicho personal al momento de recibir sus prendas correctamente lavadas y desinfectadas.
Nuevos procesos de lavado para uniformes laborales
Como es de conocimiento general, si una persona realiza los cuidados de higiene determinado, puede evitar el ingreso del virus a su cuerpo, pero ello, no significa que el virus no se encuentre impregnado en sus prendas textiles o uniformes. Debemos tener cuidado con nuestras prendas debido a que estas, pueden ser empleadas como medio de transporte y de fácil acceso del coronavirus en nuestros hogares.
En vista de esta situación, las lavanderías industriales, bajo las indicaciones de la OMS, realizan un proceso estricto de lavado para las prendas que se encuentren en contacto con el COVID-19. Uno de los principales requerimientos para ejercer la correcta desinfección es mediante la máquina adecuada, es decir, las lavadoras. Pero dicho proceso no solo se enfoca en el lavado, sino que comienza desde la entrega de los uniformes hasta el delivery de estos.
En primer lugar, se debe realizar la entrega de las prendas contaminadas en bolsas separadas. En España, el sistema que emplean muchas de las lavanderías industriales, es la recepción de la ropa embolsada y cerrada, incluso en algunos establecimientos se solicita las prendas contaminadas dentro de una bolsa roja para diferenciarlas. Posteriormente, se colocan las prendas dentro de las lavadoras a una temperatura que oscila entre 60°c a 90°c en combinación con el detergente. Una vez terminado el lavado, los uniformes pueden pasar por un proceso de secado y/o planchado a temperaturas similares al lavado para, finalmente, ser entregados a sus clientes.
Referencias tomadas y adaptadas de Mag. Empresa editora de El Comercio, El Confidencial, Ministerio de Sanidad de España y la Organización Mundial de la Salud.
