En la actualidad el uso de mascarillas faciales se ha convertido en la nueva “norma” que las personas empleamos para combatir la enfermedad del coronavirus y mantener un estilo de vida similar, al que solíamos tener antes del inicio de la cuarentena.
Está comprobado, bajo una investigación y el seguimiento que realizó el Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, siglas en inglés) que, si todas las personas utilizáramos las mascarillas faciales para protegernos del virus, evitando que las gotículas contaminadas ingresen a nuestro organismo, entonces, los números de infectados reducirían notablemente, en cuestión de semanas.
Las mascarillas impiden que la carga viral, esparcida en el ambiente, afecte a una persona al momento de absorber las partículas emitidas por otra persona.
Pero una vez, que el uso de las máscaras faciales se convirtió en un factor obligatorio a nivel mundial, estos recursos comenzaron a agotarse, e incluso, elevaron el precio, hasta llegar a montos ilógicos, debido a la necesidad. Por ello, una solución que surgió, por parte de varias marcas de comercio, es la creación y fabricación de mascarillas faciales. El objetivo de este hecho fue mantener la protección de los ciudadanos contra el coronavirus, evitando la elevación de los costos en situaciones difíciles.
Frente a esta situación, muchas personas se preguntan por el rendimiento y efectividad que poseen las mascarillas; ya que, en la actualidad, existe una gran variedad de modelos con diferentes materiales. Por ello, en el siguiente artículo, vamos a exponer los tipos de mascarillas que han surgido y el grado de protección que estas pueden brindar a las personas.
Diversas mascarillas con diferentes grados de protección
Científicos especialistas en el tema realizan simulaciones con diferentes tipos de mascarillas faciales o cubre bocas que han emergido en los últimos meses; demostrando la efectividad que estas presentan al momento de proteger a la sociedad para evitar propagar el Covid-19.
1. Pañuelos de algodón
Según la investigación, los pañuelos de algodón, una de las alternativas que las personas consideran como elemento de protección, detienen las partículas en dicho accesorio, emitiendo solo un 2,5 a 7,5 cm, aproximadamente, de gotículas filtradas al ambiente (aire).
2. Mascarilla Casera
A diferencia de los pañuelos que presentan un rango de variación, en base al material del que están hechos, una mascarilla casera, emiten una distancia de 6 cm de gotículas filtradas al aire.
3. Bandana (material elastizado)
Otra de las opciones, como herramienta de protección que se ha observado a la población utilizando, son las bandanas de material elastizado; las mismas que son una de las menos recomendables. El rango de filtración de gotículas contaminadas que generan estas “mascarillas faciales” varía entre el 7,5 y los 18 cm, aproximadamente.
4. Mascarillas comerciales (Forma de Cono, no N95)
Por último, pero no menos importante, al momento de utilizar una mascarilla comercial que no sea N95, una persona puede emitir un margen de 2 cm de gotículas filtradas en el ambiente.
Pero, ¿qué sucede cuando no utilizamos mascarillas faciales?
Aparte de considerar una exposición máxima al virus, las personas que no portan mascarillas al momento de transitar por las vías públicas, o al momento de salir a la calle, presentan un rango mayor a 2 metros de filtración de gotículas al ambiente. Ya sea en la situación donde una persona conversa, estornuda, tose o respira.
“El uso de mascarillas y protectores faciales se encuentra de forma obligatoria para toda la población.”
Referencias tomadas y adaptadas de INFOBAE.